Mis imprescindibles para llevar en un viaje

Me leí todos los blogs habidos y por haber que recomiendan qué llevar en un viaje, o cómo preparar la mochila o la valija. La mayoría no te dice la posta, esas cosas que tu sentido común no llevaría por falta de imaginación pero que tu experiencia en viajes fue documentando y acrecentando hasta hacerla casi perfecta. Mi amiga Noe, con quien viajo frecuentemente, perfeccionó esta lista de imprescindibles y yo tomé casi todos sus aprendizajes. Todos se caracterizan por tres razones: 1) no pesan, 2) no ocupan mucho espacio, 3) sin ellos el viaje no sería lo mismo (comfort o resolución de problemas). A continuación, la lista:

  • Funda protectora de valija: lo incorporé hace 2 años y fue una salvación. Antes, envolvía mi valija con el papel film que te venden en el aeropuerto a la ida o a la vuelta para evitar robos (hola, vivo en Argentina y el aeropuerto de Ezeiza tiene mala fama) y para protegerla de que se ensucie o se rompa. Pero 1) es caro 2) necesitaba tijera para romperlo 3) producía una cantidad enorme de basura. Entonces encontré las fundas de Cubritas que no solo tienen hermosos diseños sino que también tienen seguro por un año. Así podés reutilizarlas entonces se la podés poner al subir a cada ferry o tren para que no se te arruine al manipularla. Para sumarle seguridad, va con un precinto abajo que impide abrirla. Además, podés lavarla y reutilizarla hasta el infinito y más allá. La única contra es que le suma casi 1/2 kg al equipaje.
  • Candados extra y/o precintos: ideal si vamos a un hostel, pero también si dejamos cosas en un hotel algún bolso o mochila, mismo para cerrar bolsillos mientras caminamos en alguna ciudad un poco más complicada en cuanto a seguridad. Los precintos son un buen plan b ya que pesan menos pero necesitamos saber que tenemos una tijera a mano para usando queramos abrirlo. Además, si llevás la funda que mencioné arriba, acordate de llevar varios para cerrarla cada vez que quieras. Los precintos los comprás en una ferretería y los candados, si te acordaste a último momento, seguro los conseguís en el aeropuerto.
Los candados son más obvio, pero ¡los precintos fueron un hallazgo!
  • Balanza portátil: SIEMPRE aprovecho hasta el último gramo del equipaje, así que mejor estar cubierta antes de llegar al aeropuerto. Cuando armo la valija, tanto antes de salir de viaje como cuando me toca armarla y desarmarla varias veces al cambiar destino, peso todo. Una vez, con una aerolínea muy estricta (Aegean Airlines), armé y desarmé la valija 3 veces en el aeropuerto y casi pierdo el vuelo. Muchas veces paso cosas por peso entre el equipaje de mano y el que despacho, que no coincide con mi lógica de organización pero así aprovecho cada kilo disponible, así que necesito pesar para reagrupar. Cubritas también tiene, así quees una buena opción si vas a hacer un pedido así te preparan todo.
¡Ya podés ver porqué necesito balanza! Todo lo que sobresale es lo “extra” que acumulé en viaje. Oops!

Bolsas de ropa: tengo un toc y los zapatos no los puedo ver en bolsas de supermercado, me dañan la vista y necesito que la valija sea estética y organizada con lógica. Así que guardo todo en bolsas de tela: cada par de zapatos tiene su bolsa (en su momento las hacía yo con un emprendimiento que tuve que se llamaba Dolm y me quedaron varias de mis preferidas), y en los últimos viajes opté por guardar los bloques de remeras, pantalones y ropa de noche o más arregladas en los cubos de tela así armo y desarmo la valija bien fácil al llegar a destino o, si tengo que buscar rápido, saber por dónde está. Así, guardo la ropa sucia a parte en otra bolsa. Para el próximo viaje compré un set similar a éste para ver si mejoro la organización pero todavía no lo probé.

Ojotas Birkenstock de goma EVA: este fue un hallazgo ideal para el verano, sirven de ojota para recorrer una ciudad (son ergonómicas y tienen arco) o como para salir de noche (nadie se da cuenta que no es cuero), son impermeables (las podés usar en la playa y en la ducha de un hostel), y son livianas como para justificar sumarlas en cualquier equipaje de verano. Compiten fuerte con las Havaianas. Viajo en general en verano, pues ya aprendí que con frío no disfruto igual, pero si vos viajás con frío o posibilidad de lluvia llevaría un ítem similar pero para invierno como las botitas de 261, Humms o Hunter cortitas.

Zapatillas Humms: si vas a una playa de piedras, no podés no llevarlas. ¿La diferencia con las que te ofrecen en los lugares de playa? 1) estéticamente son de las más lindas tanto en modelos como en colores 2) son híper cómodas aún si las querés usar para caminar y no solo en el mar 3) son súper livianas. Tené en cuenta que si las querés usar para caminar, el modelo de zapatillas tiene arco y el de alpargatas no, además que tienen un poquito más de suela.

  • Adaptador de enchufe universal: siempre es una sorpresa al llegar a un destino y descubrir qué tipo de enchufe tiene y qué adaptador llevamos. La mejor opción es un adaptador apto todo tipo de sorpresas, todo en uno, que reduce espacio y problemas. También podés encontrarlo en Cubritas, o en una ferretería o casa de iluminación de barrio.
  • Batería externa para cargar el celular: nunca sabemos cuánto tiempo estaremos afuera en una excursión sin acceso a enchufar el celular para recargar batería. Como lo uso de cámara de fotos, es horrible quedarme sin batería justo cuando tenía un fotón para capturar. También lo uso para ubicarme o buscar transporte. Quedarme sin batería justo cuando quería buscar cómo llegar a un lugar puede ser una pérdida de tiempo. Una batería externa es siempre una buena precaución a tener en cuenta. El que compré, murió así que si tenés alguno para recomendar, te escucho.
  • Ziploc o bolsas plásticas: nos las piden en aeropuertos (nunca me lo reclamaron pero bueno) para guardar líquidos del bolso de mano, pero nos sirven para llevar comida, para guardar o proteger artículos en la playa para que no se mojen, y hasta para traer la bikini mojada, también para guardar cosas pequeñas que recolectamos en el viaje. No pesan nada ni ocupan volumen, por lo cual ¡no sobra llevar algunas!
  • Tupper y botella de agua: estos ítems pueden ocupar espacio si no los aprovechamos bien. El tupper es ideal para llevar comida en los días de largas excursiones o de playa. Soy fan de los cherries y como siempre me gusta meterme en las ferias son mi excusa para comprar y no vivirla como turista. Frutillas, guindas, o fruta cortada es siempre un buen snack cuando sentimos que comemos mucha harina en las comidas. La botella de agua es opcional, porque se puede suplir con una descartable, pero soy pro reducir plásticos y muchas ciudades tienen fuentes con agua potable, como Francia e Italia, y viene bien tener a mano para tomar, limpiar fruta o lavarse las manos. Además, ¡para reducir el presupuesto! Mis favoritos son la botella de Tupperware (buscando el link acabo de encontrar un set de cubiertos que pienso sumar en breve), auqnue también podrían ser los tupper, pero para eso prefiero los de Mepal que son preciosos. Los conseguí en Merci, en París, pero los he visto en otros lados.
  • Necesaire de mano con muestras apta avión: más allá que cuando hago viajes largos llevo todo en tamaño normal, muchas veces hago alguna noche suelta (en un ferry, en una ciudad, el día que vuelo en avión) por lo que llevo un bolso con muestras o tamaño avión de menos de 100 ml. En muchas perfumerías te venden los packs para rellenar también. El mío lo compré en Sephora y Ale Hop o un Tiger. Lo que también hago es acumular muestras de hoteles o de compras en Sephora (es mi proveedor oficial). Este tip es una buena opción para no desarmar toda la valija, o para no trasladar de más. Si por una o dos noches voy a otro lugar, dejo los bolsos en la terminal, hotel o hostel, y viajo solo con una mochila con las mudas de ropa justas. El necesaire me sirve también para la playa, así que elijo uno que se pueda mojar y/o que sea impermeable, pero que no se arruine (chau cuero, y similares, además de que pesan).
  • Toalla de microfibra: este ítem gana por tres razones 1) es liviano y ocupa poco lugar, un tercio de un toallón común, por ende es ideal no solo para la valija sino para cargar los días de playa 2) su secado ultra rápido permite bañarse y meterlo a la valija o mochila en poco tiempo, ideal porque siempre el tiempo es tirano. Mi favorita, porque soy bastante especial eligiendo colores, tiene una bolsa respirable, y elástico para enrollarla y/o colgarla es ésta.
  • Perfume en barra o tamaño muestra: el perfume en barra fue un hallazgo. Es ideal para viajar en avión porque reduce la cantidad de líquido pero también para la playa porque no tiene alcohol que con el sol mancha la piel. Pero mi otra opción es llevar muestras de perfume. Soy fan de comprar online en Sephora así que siempre recibo surtidos con mis productos. Los guardo para viajar.
  • Alcohol en gel y toallas sanitizantes: pasamos mucho tiempo afuera, tocamos miles de superficies y nunca sabemos cuando tenemos que comer algo. Llevo siempre alcohol en gel, y toallas sanitizantes. A veces las uso hasta para sacarme la sal de la playa y no seguir tan pegajosa caminando por la ciudad.
  • Desenredante de pelo en spray o crema y/o aceites protectores: este ítem es casi tan clave como el anterior. Lo uso para proteger el pelo antes y después de la playa, y desenredar el pelo después de un chapuzón. Además, no te queda tan horrible el pelo, lo podés peinar o acomodar decentemente y después al bañarte es más fácil lavarlo. Mi favorito era uno que sacó Isadora un verano pero parece que lo discontinuó. Cuando lo terminé, casi que lloré porque no solo desenredaba super fácil sino que tenía una fragancia exquisita. Ahora tengo para compré el de Klorane pero lo tengo que probar después del mar (aunque es más protector que desenredante en sí), al igual que la línea de BC Sun Protect de Schwarzkopf que me recomendaron.
Línea BC Sun Protect de Schwarzkopf y la quiero probar toda ¡porque no me decido!
  • Agua termal: este es mi tercer ítem de playa, junto con el alcohol en gel y las toallas sanitizantes, y el desenredante de pelo. También para sacar la sal de la piel de la cara y refrescar un poco. Suelo ponerme algo de crema también. En el avión, después de horas de viaje, también es ideal para volver a la vida antes de bajarme. Mis favoritas son la de Ávene tamaño viaje y la de coco que lanzó The Body Shop la temporada pasada.
  • Shampoo seco: no soy muy fan pero compré uno chico para casos de emergencia, por ejemplo una noche en un aeropuerto, un vuelo largo de mil horas. El mío lo compré en Sephora pero cada vez están haciendo más marcas. Hasta los vi en Isadora.
  • Kit de costura: suelo tener a mano algunos hilos y aguja, unos alfileres de gancho, y un botón por cualquier catástrofe. No pesan y un agujero a mitad de camino puede ser un problema. Suelo llevarlo también en la vida cotidiana en la billetera. ¡Mejor estar siempre lista! Los míos los saqué de los kit de baño de los hoteles que, cuando son completos, suelen incluir.
¡Mirá los años que debe tener el del Hilton! Fácil desde la década del ‘90. Y nunca me abandona. El otro es adquisición nueva de algún hotel al que debo haber ido por trabajo, seguro.
  • Bolso de remedios: clave llevar algunos blisters de los remedios típicos tipo botiquín. Algo para la fiebre, el estómago, el hígado, los intestinos, los músculos cansados. Paracetamol, un té Vick, hepatalgina, Sertal, relajante muscular, antialérgicos, etc. nunca están de más y no pesan. ¡Cada uno sabe lo que necesita! Nada peor que sentirte mal y encima no poder pedir el remedio que sabés te podría ayudar en el país que estás, amén de si sabés el idioma (imaginate en Turquía o Checoslovaquia y todavía es Europa). Suelo sumar alguna crema extra para piernas y pies cansados. Los primeros días qué camino más de 15 km ¡me duele todo!
  • Kit de accesorios: llevo un pastillero de Colombaro para los aros y dijes pequeños, y bolsitas de tela que junto de la vida, que vienen con cinturones, botones, billeteras, y otros y que colecciono para estos momentos, así no se pierden, y los tengo bien identificados en el bolso. Como en conjunto pesan, los suelo llevar en el equipaje de mano.
  • Valija mediana: para los viajes largos, uso una valija en la que pueda despachar hasta 23 kg, aunque intento siempre salir con entre 15 y 18 (y pocas veces lo logro). Es ideal si tiene un fuelle para controlar el tamaño, o armar todo en una valija de mano y llenarla hasta ahí, y después pasarla a la mediana (y no seguir metiendo!). Para ver cómo la organizo, mirá este post.
  • Mochila tamaño equipaje de mano: para los viajes largos uso la valija mediana apta 23 kg que mencioné antes y una mochila grande tipo Kanken o Jansport para subir al avión. Esta mochila me sirve también para llevar la ropa si viajo por una o dos noches, o por si solo paro un día en un hotel, para no armar y desarmar valijas.
  • Mochila plegable o bolsa reutilizable enrollable: viajo frecuentemente a ciudades y me gusta destinar algún día a compras. Llevar una bolsa reusable de esas que se enrollan me permite no cargar grandes bolsos, ir con cartera, y sacarla cuando me voy llenando de bolsas de compra. Uso las mías de Dolm, pero si tengo que elegir otras mis favoritas son las de Envirosax pero hay miles de modelos. La mochila la uso para la playa o días de excursión, donde no da para llevar una mochila enorme. Compré la mía en Uniqlo.
Saliendo del Gran Bazar en Estambul, llena de compras lindas y mi DOLM, mi bolsa enrollable y reutilizable que salió a salvarme una vez más. ¡Y también mi bandolera!
Mi DOLM salvándome una vez más después de un ajetreado día de compras en Roma, y mi bandolera de viaje.

“Photos are a return ticket to a moment otherwise gone».

  • Bandolera y/o Riñonera y/o Sobre: en general, llevo una bandolera que es cómoda para recorrer las ciudades, segura para tenerla bajo control, y accesible para abrirla cada 2×3. Depende qué lleve, o el lugar que tenga en la valija, llevo algo más para la noche: una riñonera, un sobre, o algo que me permita salir con plata, llaves y el celular. Tengo algunos favoritos que también uso de portacosméticos, o guarda cables.Tiene que ser ideal también para tener los documentos a mano en el aeropuerto, tipo pasaporte.
  • Billetera de papel y monedero /tarjetero: en mi vida normal uso billeteras enormes, pero para viajar me acostumbré a usar algún sobre donde poner documentos, mi billetera de papel y un monedero /tarjetero. Muchas veces tenés que sacar monedas rápido y las necesitás a mano, en la playa se moja o llena de arena y no querés que tu billetera favorita se arruine, llevás pocas tarjetas en realidad así que para qué cargar de más y encima quiero que pese lo menos posible todo. Te muestro mis favoritos: los productos de Confitte te sirven para todo esto, los monederos / tarjeteros de Besha son todos hermosos, y a su vez tengo varios que compré en Turquía o Grecia en las tiendas de souvenirs (tengo TODOS los tamaños).

Y vos, ¿qué usás y sumarías a la lista? ¡Recomendame tus imprescindibles que te escucho!

PD: está lleno de links pero ninguno es patrocinado. Son, realmente, los productos y marcas que uso.

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